miércoles, 28 de febrero de 2007

Otra vez, de nuevo aquí. Y no se por quién escribo, ni mucho menos para quién lo hago. Quizá sea tan sólo un absurdo soliloquio del que nada bueno resultará, en fin... nunca he sido bueno para expresar lo que se anida en mi cabeza.

Un amigo me escribió en versos de Satanas, el telefono ya no suena como antes, será que he empezado a resignarme. No cabe duda que el tiempo todo lo cura, y si no lo hace al menos finjimos que lo ha hecho. Ese es el punto, actuar, como antes, no, no como antes, como después... después, qué hay después del después... un cuerpo más desgastado, más cansado, sólo un cuerpo
.




No lo se, últimamente no entiendo mucho de que pasa, sólo se que ya no es lo mismo, y que quizá nunca lo será, ahora al menos, he vuelto a desamarrar las redes, ahora sólo queda confiar, sí... confiar y esperar, así igual que antes.
Parce ilusionate

1 comentario:

Ignatius dijo...

Ya que no hay nadie... silencio.